Sólo en el último trimestre no sé cuántas veces he escuchado ya esta expresión, que también podéis encontrar como IOT (Internet of things). Os hacemos un breve resumen por si os suena a chino. Ya hace tiempo que lo hacemos todo por internet: trabajar, escuchar la radio, enviar mensajes… y hacemos cosas comunes del día a día gracias al ayudas de aparatos electrónicos de última generación: hay casas con tecnología domóticas a las que podemos acceder por el móvil, hay aplicaciones al teléfono que nos ayudan a recordar qué pastilla tenemos que tomar a cada hora, y el otra día una amiga incluso me decía que se había bajado una aplicación para saber qué días era fértil! Hoy en día tenemos de todo.
Hace un tiempo se hablaba del conejo *Nabaztag, que se conectaba en internet para darte información sobre el tiempo, los titulares de prensa, nuevos emails, e incluso el horóscopo. Funcionaba pasando unas tarjetas por delante, cada una configurada con una información diferente. Funcionaba por tecnología RF (Radiofrecuencia).
Ahora imagináis que vamos más allá y que no tenéis que controlar vosotros las cosas; ya no hace falta que podáis mirar por el móvil que hay a la nevera, sino que la nevera mismo “analiza” qué falta y os envía un mail con el subject “lista de la compra”, o que el cajón del botiquín se os abre a las 10 de la noche para recordaros que os tenéis que tomar una pastilla. O que la aspiradora detectara que hay polvo al piso y se pusiera en marcha suela, en fin, mucho más de nuestra imaginación.
Algunas de estas cosas ya existen, como algunas neveras de la marca Samsung. Evidentemente los precios (más de 3.000€ por una nevera) todavía no están al alcance de la mayoría de nosotros. Pero otras cosas sí, como la Flower Power de Parrot, que se comercializará por sólo unos 50€ y que es un aparato que se pone a la planta y te envía mensajes al móvil diciendo si tiene demasiada agua, si toca regarla, etc. No os encanta?
