Proteger las instalaciones con protectores contra sobretensiones transitorias es de gran importancia para todos los dispositivos o maquinas conectados a la red eléctrica.
Una sobretensión transitoria es un pico de tensión que se genera mayoritariamente por culpa de un rayo directo a las instalaciones o indirecto en el suministro de las mismas.
La sobretensión transitoria es menor a un segundo y alcanzan valores de decenas de kilovoltios. Para los aparatos electrónicos conectados a la red puede suponer la necesidad de una reparación o, en el peor de los casos, una substitución completa.
También pueden producirse sobretensiones que no se aprecian y que no dañan los componentes de los dispositivos de forma inmediata, pero reducen considerablemente la vida útil de los aparatos.
Hay que tener en cuenta, que los aparatos pueden sufrir la sobretensión cuando están siendo manipulados por personas. Esto puede suponer un grave peligro para las personas.
¿Cómo proteger las instalaciones contra las sobretensiones?
Los protectores contra sobretensiones son la mejor opción para asegurar a las personas y el edificio protegido.
El protector se pone en el cuadro eléctrico conectado a la toma de tierra del edificio, mientras no se produce la sobretensión no realiza ninguna acción. Cuando se produce la sobretensión, el protector desvía esa sobretensión a la toma a tierra del edificio.
Si se utiliza el protector contra sobretensiones transitorias, no se corta el suministro eléctrico y los dispositivos ni las personas que se encuentran en la instalación notarán que se ha producido un pico de tensión.
En algunas instalaciones un solo protector contra sobretensiones puede ser suficiente. Sin embargo, en muchas otras, se necesitará más de un paso de protección, de esta forma se consigue un mayor poder de descarga asegurando una tensión residual pequeña.
¿Dónde es necesario tener un protector?
Es recomendable instalarlo en cualquier sitio donde se tenga un suministro eléctrico. La cuestión es el valor de los dispositivos que se encuentran dentro.
En un hogar domestico puede suponer la pérdida de los electrodomésticos, esto con lo que supone para la economía doméstica.
En una fábrica, una sobretensión puede suponer el remplazo de maquinaria de alto coste económico, con la parada de servicio mientras se realiza el remplazo y la seguridad de las personas que manejan dicha máquina. Esto podría suponer para la empresa un gasto económico de grandes dimensiones.
Por lo tanto, siempre es recomendable tener un protector contra sobretensiones transitorias, ja que las dimensiones de una sobretensión pueden suponer grandes problemas. Es muy importante que el protector este certificado y cumpla las normativas vigentes.