No es un secreto para nadie que la mejor medicina para llevar una vida sana es tener una rutina de ejercicio regular con un entrenador que nos ayude a encontrarnos mejor. Aprende cuales son los hábitos que nosotros tomamos en nuestro día a día para empezar una rutina y nunca dejarla.
Empieza fácilmente con una buena rutina de ejercicios
Al principio nos puede costar adaptarnos y quizás no lleguemos a ser constantes, sin embargo el tener como opción realizar alguna actividad física es lo mejor que podemos hacer para sentirnos bien con nosotros mismos.
Comenzar puede parecer lo más difícil, sin embargo lo más complicado viene después, me refiero a mantener una rutina constante, un hábito que llevemos a cabo todos los días. Seguramente empezaremos con la mejor de las energías, pero con el paso del tiempo ese entusiasmo inicial suele decaer.
Es mejor tener una rutina regular ya que las molestias físicas en forma de agujetas suelen aparecer después de haber realizado algún tipo de ejercicio al que no estamos acostumbrados, por lo que si empiezas y luego dejas para volver a retomar los ejercicios, nuestro cuerpo no se acostumbrará y sufrirá, es decir, después de realizar una jornada de actividad física nuestro cuerpo empieza a activar el ácido láctico.
Esto puede que genere algunas molestias el día después de haber realizar ejercicio por primera vez; esto es lo que hace que en muchos casos nos rindamos antes de tiempo.
No obstante, es importante que sepas que la única manera de combatir esta pequeña molestia es realizando más ejercicio, es decir, mantener una rutina diaria.
Si mantienes tus objetivos y aún no te has rendido, te darás cuenta que al final del día tú cuerpo te recompensará con infinidad de beneficios. El ejercicio te cambia la vida en todos los aspectos de esta.
No hay excusas para no empezar algo nuevo
Lo primero que debemos hacer es organizarnos para no tener ninguna excusa por falta de tiempo.
La Organización Mundial de la Salud nos ha recomendado realizar actividad física durante treinta minutos al día, es decir, si realizamos los entrenamientos por semana por los minutos que nos han recomendado estaríamos invirtiendo solo el 2% de todo nuestro tiempo.
Si estamos empezando a realizar algún tipo de actividad física podemos empezar poco a poco, por un tiempo menor al recomendado hasta que hagamos de este un hábito y podamos ir aumentando el tiempo progresivamente.
Despierta tu cerebro y cuerpo
Si ya has tomado la decisión de empezar algo nuevo en tu vida y has escogido la actividad física como opción, debes tener en cuenta qué actividad es la más adecuada para ti, no todos los ejercicios valen para todas las personas, por lo que es importante que empieces por algo suave y que sepas qué puedes realizar.
Los beneficios vendrán después, esto no es una carrera de obstáculos porque tú decides tu propio ritmo, es cuestión de que te logres superar cada día.
En primer lugar debemos encontrar cuál es nuestra principal motivación para empezar a realizar y a crear nuestros propios hábitos, es por eso que los beneficios de hacer ejercicio son múltiples.
Una prueba de esto es:
- A través de la actividad física podemos perder peso.
- Nos ayuda a tonificar los músculos.
- Hace que nos sintamos mejor gracias a que a través del ejercicio liberamos endorfinas que nos hacen más felices y nos hace liberar el estrés.
- Mejora nuestra agilidad y flexibilidad.
La motivación es lo que debemos tener siempre presente. Es nuestro pilar fundamental. Cuando sintamos que queremos rendirnos, es ahí donde debemos recordar el por qué empezamos a realizar esta nueva actividad y la incorporamos a nuestra vida diaria.
Encontramos la solución a todos nuestros males en una sola herramienta, el deporte, es por eso que el ejercicio suele ser la mejor medicina preventiva para nuestra salud.
¿Cómo empezar desde cero?
Hay que hacer del ejercicio una rutina, así que la actitud es primordial al igual que la motivación, constancia y dedicación.
Estos deben ser nuestros principales pilares para que cuando empecemos a realizar deporte empecemos a obtener resultados. Una vez tomada la decisión, solo es cuestión de seguir adelante y ver cómo poco a poco nuestra salud mejora y nos cambia incluso la manera de ver algunos aspectos de nuestra vida.
Consejos para empezar una rutina de actividad física
Elegir una actividad que te guste
Nadie realiza ninguna actividad si se ve obligado. A la hora de empezar debemos conocer cuáles son nuestras habilidades al igual que nuestras carencias, así conoceremos la actividad que mejor se adaptará a nosotros.
Adapta el ejercicio a ti
A la hora de empezar a realizar cualquier actividad física es importante que conozcas hasta dónde llegan tus habilidades. Recuerda que no es una carrera de obstáculos. Tú decides cuál es el límite.
Ropa y calzado
No es necesario que cuentes con ropa deportiva para realizar una determinada actividad física, sin embargo si vas a empezar busca ropa cómoda y zapatos deportivos.